Cuando el Dr. Waugsbury llegaba a la vieja cantina de Nairobi, gustaba en dedicar largas horas a charlar con los amigos de toda la vida. El brindis siempre era el mismo: alto y brioso se alzaba el grito de cuantos se hallaran en posesión de una jarra de cerveza, “Por los buenos viejos tiempos, amigos”.
Cuando esto ocurría, los mas añejos parroquianos del lugar quedaban mirando la famosa agenda ANTARA que el Dr. Waugsbury, invariablemente dejaba descansar sobre la raída madera que hacía las veces de tapa de mesa.
Era entonces cuando el mítico explorador exponía su visión de lo que debe representar una agenda de aventuras:
“Una agenda es un pedazo de la memoria de una persona, es decir, mi agenda ANTARA es parte de mi personalidad y de la misma manera que estas mal cortadas barbas existen como extensión viva de mi rostro y las ropas de campaña que me visten sirven para cubrir y defender mi cuerpo, una agenda adecuada, (no una libreta cualquiera, sino una auténtica agenda ANTARA) tiene un significado de perpetuación y de permanente recuerdo.
“Mi ANTARA” decía Waugsbury tomando con sus manos el preciado objeto de la mesa” tiene sus tapas y guardas hechas en piel de ciervo (dada la vida que llevo resulta, por su resistencia y flexibilidad, la mas adecuada a mis necesidades). Dentro de ella, llevo muchos años almacenando augsburyespacios diferentes (direcciones, elecciones, recuerdos y contactos) y no dejará nunca de sorprenderme la enorme adaptabilidad y portabilidad de este excepcional objeto de escritorio.
No pocas han sido las veces en las que he tenido que ocultar mis apuntes y recuerdos, pero con mi antara no existe problema alguno, indeformable y prácticamente irrompible mis secretos se hallan siempre a salvo con ella.
Aquella noche, como tantas otras noches disfrutadas en compañía de Waugsbury, no entendí su siempre enigmático mensaje. Solo entonces pude saber como hasta hace un rato he sabido que algún misterio indescifrable encerraba aquel cuaderno. Pero ahora ya no, ahora ya lo se todo, ha sido de forma casi casi casual, pero lo se TODO.